¿Eres más de escapadas de fin de semana o de viajes largos a lugares exóticos? No importa, hoy nos ponemos en el papel de mochilero y nos lanzamos a descubrir por qué las mochilas de mochilero son la mejor opción sin importar el tiempo o el medio de transporte. ¿Nos acompañas?
Consejos para preparar la aventura
Elegir la mochila de mochilero adecuada seguramente es tan importante como decidir el destino. Está claro que el tamaño de la mochila de viaje dependerá de la duración de la aventura, principalmente. Aunque la época del año y el lugar que has decidido visitar también tienen su papel en esta ecuación.
No es lo mismo hacer un viaje por las capitales europeas, que decidir acampar en medio de una montaña helada o disfrutar de unas relajadas vacaciones en la playa. Así que fíjate bien en la imagen y descubre qué mochila necesitas.

Nuestro mejor consejo es sé selectivo y organizado
Raramente necesitarás una mochila de mochilero superior a 65L de capacidad. Y mejor. Piensa que tendrás que cargar con ella. Así que si tienes que decidir entre aumentar la capacidad de la mochila o prescindir de alguna cosa, opta por la segunda opción.
Elimina las cosas superfluas y cíñete al lema de: “lo que te sirve para una semana, te sirve para un mes”. No es necesario elegir un conjunto para cada día. Lo ideal es que optes por prendas que sean fáciles de secar, combinables y, por supuesto, que no se arruguen. Te proponemos un reto: elimina un 25% de lo que hayas elegido inicialmente. Verás como al final no acabas echándolo de menos.
Mejor llevar el peso repartido entre varias personas
Si has decidido embarcarte en esta aventura junto a más gente, ¡aprovéchalo! Repartiros las cosas de uso común para no cargar con todo el peso. Ya lo dicen… “compartir es vivir”. Pues eso ¡a compartir!
Una vez hecha la lista y repartido lo que va a llevar cada uno, es momento de ponerse manos a la obra. Coloca las prendas de forma ordenada y utiliza bolsas de plástico para comprimirla y que ocupe menos espacio.
Objetos delicados y líquidos mejor por separado
Además también te servirá para localizarlas fácilmente y sacarlas de la mochila enseguida. Evita poner líquidos o artículos delicados al final de la mochila si no quieres llevarte un susto. Quizás en estos casos es mejor contar con una mochila pequeña que luego te sirva para llevar tus efectos personales cuando salgas de excursión.
Ventajas de hacer un viaje como mochilero
Tanto si ya estás convencido de que viajar con mochila de mochilero es la mejor opción como si todavía estás dubitativo, vamos a darte siete razones que bien te reafirmarán que tu decisión es la correcta o bien terminarán de convencerte para que en tu próxima aventura apuestes por una mochila de mochilero.
El terreno puede ser pantanoso
A veces el recorrido no nos lo pone fácil. Y más si decidimos viajar a países menos desarrollados, sumergirnos en la montaña o hacer cosas tan cotidianas como subir y bajar las escaleras del metro. ¡Una preocupación menos!

Qué tiempo hará…
Saltar encima de un charco, si vas preparado, puede ser divertido. Pero arrastrar la maleta por el barro o la nieve, no lo es. Créenos. Por eso una de las grandes ventajas de optar por una mochila de mochilero es que podrás hacer frente a cualquier inclemencia meteorológica.
Los lugares más bonitos nunca tienen fácil acceso
Saltarte el plan preestablecido tiene su punto. Meterte por caminos alternativos o adentrarse en la selva, incluso alojarse en lugares con pocas o sin ninguna infraestructura, le dará al viaje un toque aventurero que te encantará. Y que te costará más hacer si vas con una maleta en vez de con una mochila de mochilero.

Si hay algún imprevisto, quizás tengas que salir corriendo
Imprevistos. Que poco nos gustan. Pero a veces es inevitable que en un viaje (sobre todo si es largo) se den. Llegar tarde al aeropuerto o darte cuenta de que el autobús que está pasando es el último, pueden ser motivos que te hagan correr a contrarreloj. Sin duda llevar como equipaje una mochila de mochilero te hará la carrera más llevadera.
Libertad de movimiento
Qué bien suena. Sobre todo, si buscas un viaje lleno de aventuras, donde atravesar un extenso parque natural o escalar una montaña está entre las actividades que vas a realizar. Pero si no es así, tener las manos libres también te servirá para mirar el mapa mientras comes algo o para sacar una foto. ¿Quién dijo que no se podían hacer varias cosas a la vez?

Todo bajo control
Así da gusto viajar. Sin preocupaciones. Sin tener que estar con un ojo puesto en nuestro equipaje mientras intentamos buscar un punto en el mapa, contestamos un mensaje o decidimos dónde comer en el aeropuerto. Y es que apostar por una mochila de mochilero significa llevar siempre nuestras cosas a la espalda. No hay perdida por despiste.
Ser mochilero, mola
Y, por qué no, viajar como mochilero mola. Más allá de sus ventajas prácticas y funcionales, tiene esa esencia aventurera y diferente que a todos los que hemos viajado con mochila nos engancha. Será esa flexibilidad o libertad que nos hace sentir la que nos hace disfrutar todavía más de cada segundo de nuestro viaje.
Las 3 mejores rutas para disfrutar como un verdadero mochilero
Echarse a los hombros una mochila de viaje y lanzarse a recorrer caminos es una experiencia que hay que vivir. Sin duda una de las mejores maneras de descubrir el mundo. Aunque lo cierto es que podrías ir a cualquier lugar como mochilero, hay destinos que a nosotros por sus paisajes, su cultura, su historia, su gastronomía y su gente nos encantan. ¿Quieres conocerlos? ¡Síguenos!
De isla a isla, Nueva Zelanda
Comienza en Auckland, donde muchos viajeros saborean su vida nocturna antes de desembarcar en Rotorua para disfrutar de su actividad volcánica y de un hangi (comida típica maorí) amenizado con una danza tradicional. La siguiente parada es Taupo, lugar perfecto para tirarse en paracaídas y practicar deportes acuáticos en su lago.
La mejor forma de cruzar de una isla a otra es en ferry
A continuación, la ventosa Wellington, famosa por sus cafés y su peculiar Beehive (sede del Parlamento). Desde aquí se puede cruzar a la Isla del Sur y avistar ballenas en Kaikoura antes de llegar a Queenstown y recorrer sus magníficos cañones en lancha o continuar hasta los glaciares Franz Josef y Fox.

Hamurana Springs en Rotorua, Nueva Zelanda
Ruta 66, EE.UU.
Pocas carreteras presumen de un espíritu más auténtico que la Ruta 66. Pese a que su nombre dejó de utilizarse en 1985, muchos aventureros siguen transitando por ella para ver lo mejor del país. Comienza en Chicago, pasa por St. Louis, famosa por su blues, y sigue hasta Kansas, en el corazón de las Grandes Llanuras.
También conocida como la “Madre de las Carreteras de América”
Más tarde, atraviesa Texas y alcanza su ecuador junto a una colosal escultura de chatarra. El paisaje de vacas se repite en Nuevo México y en Arizona, que posee del mayor tramo ininterrumpido de la carretera original. Finalmente, California aparece ante el viajero y Los Ángeles completa la aventura con Hollywood y Rodeo Drive como puntos culminantes.

Típico Café-Motel en las carreteras de la Ruta 66, EE.UU.
Banana Pancake Trail, de Bangkok a Laos
Los viajes por el sureste asiático suelen comenzar en Khao Sanh Rd, el centro mochilero en Bangkok. Luego las hordas se dispersan hacia las playas de Ko Pha-Ngan o a la exclusiva Phuket.
Bangkok y Singapur son dos nudos de conexiones aéreas
Otros se dirigen a Siem Reap (Camboya) para contemplar el legado de civilizaciones antiguas en Angkor Wat, antes de proseguir hacia Ciudad Ho Chi Minh y continuar rumbo norte por el litoral de Vietnam hasta las majestuosas formaciones de piedra de la bahía de Halong. Para alargar el viaje, adentrarse hasta Vientián, la capital de Laos, o dar un paseo en elefante por el Parque Nacional de Khao Yai.

Templo de antiguas civilizaciones en Angkor Wat, Camboya
No lo dudes, si estabas pensando en descubrir el mundo de mochilero apunta nuestros consejos, compra el billete, organízate y… ¡disfruta de la experiencia mochilera! Quizás podrías empezar por alguno de los destinos que te hemos nombrado. ¿Incluirías alguno más? Cuéntanoslo.